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Existen dos emociones básicas, una es el amor y la otra es el miedo.
El miedo es el resultado de la falta de amor a nosotros mismos, al igual que la oscuridad es igual a la falta de luz.
Cuando sentimos miedo este puede ser bueno o malo.
Es bueno cuando lo sentimos por amor a nosotros mismos, por ejemplo estamos en peligro y nuestra mente lo detecta y nos pone en guardia haciendo actuar a nuestro sistema nervioso para salvarnos y mantenernos vivos.
Es malo el miedo cuando este nos hace daño, por ejemplo nos sentimos incapaces de hacer algo.
Para sentir amor por nosotros mismos, tenemos que respetarnos y ello con lleva hacer, decir, sentir y pensar lo mismo, ser coherentes.
Cuando estamos en coherencia estamos llenos de amor por nosotros mismos y nada nos parece imposible, nada ni nadie es invencible, pues comprendemos que no hay nada ni a nadie que vencer, estamos repletos de energía y nos sentimos llenos de luz viendo al mundo con amor y compresión.
Es en este estado, cuando podemos decir, que hemos alcanzado la felicidad.
Cuando enfermamos es porque estamos llenos de miedo e incoherencia. Hay que liberarse de ese miedo llenándonos de amor hacia nosotros mismos.
¿Cómo conseguir esto? Actuando con respeto hacia nosotros (pensando, haciendo, sintiendo y diciendo lo mismo), todo en armonía con lo que somos.
Y ¿Qué somos? Hemos venido a este mundo para sentir amor y paz, pues es lo único que llena nuestros corazones y nos hace felices. El resto no existe, pues nos deja el corazón vacio y en constante búsqueda.
Haz el bien contigo mismo y recibirás bien para ti y entonces podrás dar bien a los demás.
Amate a ti mismo y entonces podrás amar a los demás
Todos pertenecemos a un mismo cuerpo, todos sabemos cual es la verdad, solo que el miedo al que dirán, el miedo a no seguir las reglas que nos han impuesto, el miedo a la soledad, el miedo en definitiva , oculta nuestro sentir y nos hace actuar en contra de nuestro ser, en contra de nosotros mismos.
Hay que actuar con amor a nosotros y entonces es cuando podremos amar a los demás.
Solo existe el amor y el miedo.
Yo elijo el amor ¿Y tú?
José Dorado
